Visitas al médico para mujeres de 40 a 49 años

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Que la vida comienza a los 40 años ya no es ninguna novedad. Hoy en día las mujeres que entran en esta etapa se sienten más vitales, realizadas y optimistas que nunca y generalmente han conseguido equilibrar sus profesiones y familias de una manera casi perfecta.

La mujer de 40 años alcanzó la madurez que le faltaba en la juventud y se ha convertido en una sabia administradora de su tiempo, pero no tiene que olvidarse que el cuidado de su salud es un elemento indispensable para que todo el engranaje funcione a las mil maravillas.

«Siempre he querido mantenerme joven, como si los años no pasaran. Eso se me convirtió en una obsesión cuando cumplí los 40«, cuenta Sofía, de 43 años. Ella no está sola, la preocupación por el envejecimiento marca una tendencia en mujeres de 40 para arriba pero hay algunos datos que son importantes tener en cuenta.

Las personas crecen y se desarrollan hasta los 20 años debido a la acción de una hormona del crecimiento que se aloja en el cerebro. Por razones desconocidas aún, en esa etapa, la hormona deja de funcionar y se puede decir que el proceso de envejecimiento ha comenzado.

«La producción de la hormona decae a un ritmo de 14 por ciento cada diez años y es por eso que los efectos del envejecimiento se comienzan a notar a partir de los 40«, explica la Dra. Maria Sulindro, especialista en medicina física y rehabilitación y fundadora de la Academia de Investigación del Antienvejecimiento de California.

Existen tests específicos que miden los niveles celulares para determinar precisamente el proceso de envejecimiento a que está sometido el organismo.

La edad física, ya sean 40 ó 45 años, no tiene que coincidir obligatoriamente con la edad biológica. «A esto se le llama edad celular y existen muchos test y pruebas que justamente miden la capacidad pulmonar, la tonificación de los músculos, la fuerza del organismo en general y los niveles de hormonas para determinar la edad biológica exacta de una mujer», dice la Dra. Sulindro.

Con esta información, el médico puede definir con mayor exactitud qué tipo de tratamiento es mejor para cada mujer y ayudarla a que estos años sean lo más vitales posible. En definitiva, la clave parece estar en las palabras de la especialista cuando dice que «si uno no es joven por dentro jamás podrá serlo por fuera».

CYNTHIA ZAK