Fobias

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Ejemplos de fobias hay muchos, desde la fobia a volar en avión, hasta el miedo irracional a los animales o a ciertas situaciones. Pero, el origen de este sentimiento de pánico aún no ha sido develado por la ciencia.

Las fobias son terrores desproporcionados al estímulo que los origina. Se trata de una sensación de miedo inmenso que invade a algunas personas y no las deja funcionar normalmente, ya que les produce una sensación invalidante.

Tal vez la fobia más conocida sea la aracnofobia, la que se manifiesta -ante la presencia del arácnido-, con una reacción de parálisis que la persona no es capaz de controlar.

Según la teoría freudiana, en el caso del temor a las arañas, el origen se encuentra en problemas en la relación con la figura materna. Esto, debido a que el sujeto hace una proyección inconsciente de la madre en este insecto. ¿Por qué se produce?, todavía no hay una respuesta clara.

Miedo irracional

Para quienes sufren de alguna fobia, las situaciones cotidianas parecen ser terribles y el miedo que producen es tan inmenso que el afectado no se atreve a salir solo a la calle o a enfrentar ciertas situaciones que para el resto de la gente son completamente normales.

Estos episodios convierten a las personas en verdaderos esclavos de su miedo, porque no les permiten tener una vida normal.

Tipos de fobia

Dentro de las fobias, se pueden definir tres tipos:

Fobias simples

Fobia a animales o a objetos. Pueden aparecer después de vivir una experiencia traumática, aunque pueden ser de origen desconocido. Algunos ejemplos de estas fobias son:

– Fobia a animales o zoofobia: perros (cinofobia) o serpientes (ofidiofobia), entre otras.
– Fobia a insectos o entomofobia: la más común es a las arañas (aracnofobia).
– Fobia a objetos punzantes: cuchillos, tijeras, hachas, etc.

Agorafobia

Tiene relación con sentimientos de ahogo y desesperación en espacios abiertos o muy cerrados. La persona siente que está sola en el mundo y que si le pasara algo, nadie la podría ayudar.

La gran mayoría de estos trastornos se manifiesta con la presencia de ataques de pánico, es decir, con una reacción sicosomática muy fuerte que produce mareos, dificultad respiratoria, dolor de cabeza y pérdida del equilibrio.

En esta categoría se encuentra la fobia al vuelo, ya que cuando el avión se encuentra en el aire es imposible escapar y el miedo y angustia que genera esta situación es tan incontrolable que la persona teme sufrir un ataque de pánico, que lo dejaría en evidencia frente a los demás.

Fobias sociales

Temor a aparecer en público, no se trata de hablar frente a una audiencia numerosa, sino que a pequeñas situaciones, por ejemplo, comer o caminar: la fobia social.

Como explica Rodrigo Erazo, siquiatra de la Clínica Las Condes, en Santiago de Chile, estas situaciones generan gran angustia a algunas personas, porque sienten la mirada inquisitiva del resto y se ponen tan nerviosas, que terminan actuando torpemente, lo que tratan de evitar aislándose.

Terapia cognitiva v/s sicoanálisis

Uno de los puntos en los que la comunidad científica aún no llega a acuerdo tiene que ver con el origen de las fobias y su tratamiento, «un sicoanálisis puede convertirse en una eterna terapia que ayuda a develar por qué se sufre determinada fobia y dónde está su origen, pero no necesariamente representa una cura. La terapia cognitiva o cognitivo conductual puede ser el mejor camino a seguir, porque cumple su objetivo de aplacar el temor desmesurado, aunque no se preocupa de encontrar las causas», explica Erazo.

El origen de las fobias es todavía un misterio para la ciencia.

Si lo que se busca en la consulta es la solución al problema, para dejar de ser un inválido frente a ciertas situaciones, las técnicas conductuales siguen siendo lo más apto. Pero, si se siente una necesidad imperiosa de autoconocimiento y de develar el misterio del origen, lo mejor será el sicoanálisis, por lo que depende de cada persona optar por un tipo de terapia o por el otro.

Además de estos tratamientos de corte sicológico, se puede recurrir a medicamentos que bajan el nivel de angustia y ansiedad, éstos pueden utilizarse cuando se trata de un problema que está presente durante varios años y debe recetarlos un médico.

Una característica importante para tomar en cuenta antes de comenzar el tratamiento es que mientras antes se acuda a un especialista, mejor será el resultado. «Las personas que llevan años negando este estado y evadiendo las situaciones que le producen terror, tendrán una recuperación lenta y difícil, pero las que acuden rápidamente a terapia, lo más probable es que se recuperen con facilidad», agrega el especialista.

Enfrentar el miedo

La terapia cognitiva tradicional trata de involucrar -en forma gradual- al paciente con la situación que lo paraliza.

«En una primera etapa se puede recurrir a fotografías para que la persona se familiarice con el objeto de su miedo. Luego, películas, escenarios virtuales, para finalizar con el enfrentamiento con la situación misma», explica Erazo.

En el caso de la fobia al vuelo, el tratamiento consiste en ir probando poco a poco, hasta dónde se puede llegar sin sentir miedo. Luego, acercarse a un avión y comprender en forma racional que esta situación no es de temer. Así, el paciente logrará una recuperación gradual para poder volar tranquilamente y tener una vida normal.

«El miedo puede ser tan invalidante, que las personas que superan la fobia comienzan una nueva vida y recuperan su libertad. Es tanto el cambio, que ellos se sienten aliviados y vuelven a vivir las cosas cotidianas con la normalidad necesaria como para no sentir temor,» agrega el especialista.

Por esta razón el siquiatra recomienda que ante la primera aparición de este sentimiento angustiante, las personas se acerquen a un terapeuta, antes de que este problema se transforme en una verdadera pesadilla.