Una nueva técnica, basada en las ondas vibratorias, que permite a los detectar bultos sospechosos de acuerdo a su dureza, parece ser un método diagnóstico eficaz para detectar cánceres de mama.
Con este nuevo procedimiento se envían ondas de vibraciones a través de la mama. Allí dónde existe una distorsión inusual de las ondas se supone que existe un fragmento de tejido menos elástico. Los datos se convierten entonces en una imagen tridimensional que el especialista puede analizar antes de decidir si existe alguna anomalía.
Este método ha sido denominado elastografía por resonancia magnética (ERM). Ralph Sinkus, científico del centro de investigación de Philips (fabricante del aparato), ha manifestado que la ERM puede ser de uso generalizado en un período aproximado de dos años.
«El examen es absolutamente indoloro y se puede comparar con las vibraciones de una maquinilla de afeitar eléctrica», aseguró este científico. «Las ventajas son numerosas. Por una parte el resultado es objetivo en comparación a la exploración manual, y además de eso, es visible. Por otra parte, esta técnica también puede mostrar bultos que son muy pequeños y profundos, o cercanos a las costillas y que por ello pudieran no detectarse con las exploraciones médicas sistemáticas».
En estos momentos, se está programando una prueba clínica de dos años en el Hospital Universitario de Bonn y de Hamburg-Eppendorf. Ralph Sinkus dijo que espera que el sistema salga al mercado una vez que la prueba se haya completado y se haya demostrado su eficacia.
03 07 2002